martes, mayo 31, 2011

El orígen de mi felicidad

Esta tarde u otra tarde miro la lluvia fina recorrer la calle y el sol poniente alumbra en retirada sigilosa estos momentos, sin duda la escena es tan hermosa que no puedo pensar en otra cosa que no sea el placer de estos instantes que son de esta tarde y que ahora tras una sola palabra o un pensamiento ya son de esa otra tarde en el pasado.

La felicidad esta en mí, soy dueño de ella y único garante de su esquiva existencia.

Y esa tarde no dejo de pensar que toda esta tristeza que me embarga, que me duele y rasga la piel, que me estremece como si pudiera presagiar mi muerte y me deja taciturno susurrándome al oído que no hay más hoy que esta huida prolongada de un amor que acaba y que me sigue a donde quiera y que no da tregua a mis pasos ni ante súplicas procaces tiene por supuesto y como siempre un origen en ese mismo.

Hoy la tristeza esta en mí y ata mis pupilas a cada uno de esos pequeños universos donde una gota de lluvia ha caído y en breve evaporada será únicamente un recuerdo de estos ojos tristes.


El carnaval del mundo engaña tanto,
que las vidas son breves mascaradas;
aquí aprendemos a reír con llanto,
y también a llorar con carcajadas.

[Juan de Dios Peza]